La insuficiencia renal crónica es una enfermedad que afecta a más del 10% de la población mundial, y según la sociedad Española de Nefrología (S.E.N), en España se ha ido incrementando en los últimos años.

Así mismo, al igual que muchas otras enfermedades crónicas, los riesgos se incrementan con la edad, sin dejar de lado que las causas son complejas y muchos pacientes no presentan síntomas hasta que se encuentran en una etapa avanzada. Por ello, es necesario divulgar y conocer más sobre esta enfermedad que ayude a la detección precoz.  

¿Qué es la insuficiencia renal crónica?

Ya hablamos con anterioridad de la insuficiencia renal (link post) y sobre sus tipos y grados. Hoy nos centramos en la insuficiencia renal crónica que consiste en el deterioro gradual de manera irreversible de las funciones renales y cuyos síntomas se van desarrollando lentamente, es decir, los riñones dejan de cumplir sus funciones y esto ocurre en un largo período de tiempo.

Origen

La función principal de los riñones es filtrar la sangre y eliminar las toxinas del organismo y también controlar el nivel y exceso de agua en el cuerpo. Al mismo tiempo, mantienen el equilibrio químico, contribuyendo con la producción de hormonas y controlando la presión arterial.

En el momento en el que los riñones pierden su capacidad para cumplir eficazmente sus funciones, se da origen a un fallo renal y cuando esto se agrava, con el paso de tiempo, se presenta la última etapa que es la insuficiencia renal crónica.

Causas

Cualquier persona puede padecer una insuficiencia renal crónica, en la mayoría de los casos es debido a situaciones de salud que han ocasionado un daño progresivo con el paso del tiempo. Algunas de las causas más frecuentes son:

  • Presión arterial alta: si no es controlada puede dar origen a ciertas afecciones crónicas, además de dañar los vasos sanguíneos de los riñones.
  • Diabetes: si la diabetes no se controla convenientemente, afecta a la capacidad de filtrado de los riñones.
  • Glomerulonefritis: causa daño en las unidades de filtrado.
  • Poliquistosis renal: es una enfermedad hereditaria que va deteriorando los riñones.
  • Nefritis intersticial: causa una inflamación de los túbulos de los riñones.
  • Obstrucción extendida de las vías urinarias: producto de algún tipo de cáncer o cálculos renales.
  • Reflujo vesicoureteral: esta enfermedad causa que la orina llegue a los riñones.

Tratamientos

El daño en los riñones en irreversible cuando se tiene una insuficiencia renal crónica, haciendo necesario recibir un tratamiento de diálisis o un trasplante de riñón.  No obstante, también existen medidas que puedes realizar para prevenir esta situación. Por ejemplo:

  • Atención medica de apoyo.
  • Controlar el consumo de azúcar, así como una dieta baja en sal y grasa.
  • Prevenir el consumo de medicamentos que afecten a los riñones.
  • Mantener un peso saludable.
  • Realizar ejercicios.
  • No fumar.

Síntomas:

Los síntomas de una insuficiencia renal crónica no se perciben hasta que los riñones se encuentran en riesgo, sin embargo, en la medida que sus funciones disminuyen pueden presentarse las siguientes señales:

  • Nauseas o vómitos.
  • Comezón.
  • Calambres musculares.
  • Pies hinchados.
  • Exceso o poca orina.
  • Dificultad para respirar.
  • Presión arterial alta.

Los síntomas de una insuficiencia renal crónica no son específicos, ya que, los riñones tienen la capacidad de adaptarse y compensar sus funciones. No obstante, si presentas algún problema de salud que aumente los riesgos debes acudir al médico para una valoración del funcionamiento de los riñones. Para ello, es tan importante contar con una plataforma como Sentinel Monitoring que permite a los pacientes estar conectados con sus médicos y que estos puedan llevar a cabo un seguimiento y monitoreo de forma telemática y que permite prevenir y abordar cualquier problema de salud a tiempo. De hecho, estamos trabajando estamos trabajando junto al nefrógolo Dr. José Scapuzzi para incorporar un plan de seguimiento de pacientes con enfermedades renales que les permita estar en constante contacto con el equipo médico.

 

 

 

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